Ana Cecilia Romano Barraza de 21 años vivía con Bernardo Pastorino, un acaudalado hombre de 61 años. Ella apareció muerta con un disparo en la cabeza.
Este martes inicia en Tucumán el juicio en el que se juzgará si Bernardo Pastorino asesinó a Ana Cecilia Romano Barraza.
Luego de un largo proceso judicial se espera que Bernardo Pastorino concurra a tribunales, lo haría acompañado de su médico personal por problemas cardíacos, para buscar cerrar la causa que tanto dolor le causó a los familiares de Ana barraza.
El caso se elevó a juicio en noviembre de 2015 y la anterior audiciencia, no se abrió a debate porque el imputado se descompensó.
El Caso
El crimen ocurió en 2007. Una humilde joven de 21 años oriunda de Garza. Había formado pareja con un terrateniente de 65 años, y juntos vivían en la ciudad tucumana de Juan Bautista Alberdi. Una extraña y violenta muerte rodeada de dudas y misterio marcó el triste y abrupto final de un cuento de hadas.
En eso parecía haberse convertido la vida de Ana Cecilia Romano Barraza, una joven de 21 años de Garza, Santiago del Estero, que se unió con Bernardo Pastorino, un terrateniente tucumano de 65 años, con quien vivía en una vistosa residencia del centro de Juan Bautista Alberdi, ciudad ubicada a 90 kilómetros al sur de la Capital tucumana.
El caso había sido caratulado de inmediato como suicidio. Pero cuando Olga Isabel Barraza, madre de la fallecida, arribó a Tucumán para saber qué había pasado con su hija, empezaron a aflorar algunas dudas muy serias con respecto a lo ocurrido.
Por un lado, se hallaron manchas de sangre en prendas de vestir de Pastorino, también en otras habitaciones de la vivienda y en el baño.
Además, durante la autopsia aparecieron golpes en el rostro y rasguños en el pecho de la mujer.
Pero la principal sospecha es que el orificio de entrada de la bala que acabó con la vida de Ana estaba en la parte derecha de su cabeza, mientras que ella era zurda.